Me puse a mí misma en segundo plano para llenarte de flores el corazón, posé para ti bajo la luna desnuda y te evadí del mundo cuando estabas perdido. No me considero egoísta, no en primera estancia, ¿a caso no soy un ser humano?
"Que vuelva pronto" ruego al dueño de la vida cada vez que te marchas. Perdida entre todos esperando tu abrazo para posar mis labios en tu corazón desconocido.
Te miro, te vuelvo a mirar con ojos vidriosos, te miro de nuevo amarrando al nudo de la garganta, que te quería más que nada imaginado, visto o creado en la tierra. Más que todo aquello por lo que se lucha, por lo que hay tanto dolor en el mundo.
Y supe como he de morir, rodeada de tulipanes...
No hay comentarios:
Publicar un comentario