La cabeza revolando circunfleja de la almohada, el nido en el pelo y de corazón untas mi camisa cada mañana. Caricias a los hombros que rígidos ceden y labios que retornan a los tuyos como las palomas a la plaza (tu boca bando volea de guirnaldas mi boca).
Me levanto y me someto al instante que nace desde tu cuerpo. La luz vacila en tu cuerpo y sigue habiendo silencio. Oigo como madura un río, donde un pez planta un árbol y una golondria al amor se somete. Un río en el que fluyo, fluyes.
Tú, equilibrio que flojeo donde mi alivio y el mundo se reúnen.
Como ave llena de brisa, cruzo el estrecho, vuelo el cielo azul y claro. Cedo a la luz que repite la incierta sombra de las cosas.
A ritmo de tu corazón las estaciones bullen y los días se suceden. Iris que me devora, labio de óleo que pinta mi cuerpo.
Nado por la umbría hasta tus ojos, desciendo del eco de la tiniebla y te encuentro. En la cama donde la luz vacila en tu cuerpo.
Cambié el perdón por la vida. Optar por vivir, porque "La vita é bella", a pesar de todo.
Mis niños
El amor se riega todos los días
- Vαleиtinα
- En el nirvana, El séptimo cielo, Heard & McDonald Islands
- RÍE. LLORA. AMA. VIVE. Republicana, progresista y romántica por excelencia. Fuerte sentimiento de la justicia. Divino desastre pálido y frío. Creo en el destino, en la educación al pueblo y en el cambio. "Sapere aude."
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